DEBILIDADES

Nublados de verano, con amenaza de lluvia. O no tanto amenaza como promesa de alivio de una tensión contenida. Y ese olor de la mampostería mojada cuando la tocan las primeras gotas. *** Confesaré una debilidad: he disfrutado con el pequeño ciclo de Tinto Brass que me ha deparado la televisión por cable. No tanto con la pretenciosa y muy conocida Salón Kitty , con su utilización artera de la parafernalia nazi como aderezo sadomasoquista -y, sin embargo, hay que agradecerle a esta película lo que tiene de parodia desaforada de productos de prestigio como La caduta degli dei , de Visconti, o Portiere di notte , de la Cavani-, como con otras dos que no había visto, y que tienen su gracia: Senso'45 , también una inteligente reductio ad absurdum de la famosa película de Visconti, con un tratamiento del nazismo (pues se trata de una traslación del argumento viscontiano a los tiempos de la república de Saló) mucho más matizado que la mencionada Salón Kitty ; y, sobre todo, Mirand