TOO OPTIMISTIC

You were too optimistic about the Spanish weather , le digo a mi compañera inglesa, que todavía sale a la calle con los vaporosos vestiditos veraniegos que se trajo en septiembre, cuando llegó a España, y se defiende mal del frío con una fina cazadora sobre sus hombros. Ni siquiera gasta medias, por lo que la sola visión de sus piernas blanquísimas expuestas a la intemperie resulta verdaderamente dolorosa. En mis intercambios verbales con ella en la escalera, mientras nos dirigimos a clase, trato de abordar delicadamente la cuestión. Al fin y al cabo, a sus imprevisores veinte años les puede venir bien, no sé, un consejo paternal, y quizá alguna prenda de abrigo prestada... Pero no. Lo que le preocupa, me dice, es la vuelta. It's much colder in Britain , comenta. Y tiene previsto, para hacer frente a las galernas que saldrán a recibirla a su llegada, comprarse un jersey en Zara -lo que, entiendo, le servirá también de souvenir - antes de la partida. *** Las hijas de las mad