DIETAS
"He vivido en una época en la que a menudo se juzgaba a un hombre en virtud de un cuestionario", leo en las primeras páginas de las Memorias de Iliá Ehrenburg. Y me acuerdo de los siniestros cuestionarios autoacusatorios que rellenaban algunos personajes de Vida y destino , la magna novela que Vasili Grossman, amigo y coetáneo de Ehrenburg, escribió sobre el estalinismo. Coincidió mi lectura de esa novela con una época en la que en mi medio laboral me asaeteaban con encuestas que recordaban algo a esas autoinculpaciones estalinistas. Fue por entonces cuando decidí no contestar ninguno de esos cuestionarios, o hacerlo siempre de manera lacónica e impersonal; y, a ser posible, devolviendo la pregunta, como dicen que hacen los gallegos, a quien me la hacía... Ahora me he relajado un tanto y ya no sigo a rajatabla esos principios, pero no por ello me he vuelto más elocuente en esos programados actos de contrición. A la autocrítica, que deriva siempre hacia la autoinculpación,